domingo, 31 de mayo de 2009

Restaurante Stanislavski en Amsterdam


En pleno bullicio, en la misma Leidseplein, está el Stadsschouwburg (teatro de la ciudad) y en el teatro está el Stanislavski, la cafetería restaurante del mismo.
Es un muy buen sitio para comer, unas instalaciones agradables, con una carta más que suficiente, un servicio atento y que por supuesto habla ingles y una cocina cuidada y actual y con buena relación calidad/precio. Refresco, copa de vino, 6 ostras, una ensalda y un steak tartare costaron 37,95.
No puedo dar información para celiacos. Cuando me es difícil comunicarme suelo pedir platos seguros sin consultar o mostrando las instrucciones en varios idiomas que tiene colgada la FACE en su blog, y que alguna vez me han sacado de apuros.
En el primer piso tiene una terraza que es un mirador privilegiado al bullicio de la plaza.

Amsterdam



Soy un enamorado de Amsterdam y de Holanda, y creo que hay suficientes razones para estarlo.
En primer lugar sus indiscutibles atractivos culturales, encabezados por el Rijksmuseum (pasear, sin más, por la "galería del Honor" de su primera planta es uno de esos placeres que se recuerdan), el Van Gogh y el Stedelijk, cada uno a continuación del otro, son ya razón más que suficiente. El conjunto es dificilmente superable y posiblemente solo Madrid ofrezca una oferta de tanta altura.
En segundo lugar la belleza de la ciudad en si, con sus canales flanqueados de edificios burgueses que muestran la pujanza económica que tuvo la ciudad. Simplemente pasearla, tomar algo en una terraza a la orilla de un canal, tranquilamente, dejando pasar el día. A veces el asombro de las increibles arquitecturas que consiguieron meter una casa de 5 pisos en un frente de 2 metros, con puerta de acceso incluida, con escaleras estrechas y de fuerte pendiente, que obligaban a construir sus fachadas inclinadas hacia delante y con gabletes para hacer posible la subida y bajada de muebles y enseres.
Y en tercer lugar la vida, el ambiente de respeto y de tolerancia. Estar en Amsterdam es fácil, y si además te estás tomando un café o una cerveza en "Three systers" en Leidseplein todavía lo es más. A pocos metros hay un coffe shop de la cadena Bulldog, presentes en toda la ciudad. Tambien cerca hay muy buenos locales de jazz. También si quieres puedes ir a la plaza del Dam, donde encontrarás a todos los turistas de la ciudad.Y si hay tiempo se puede ir a pasar un día a Utrech, a comer a la orilla del canal, o bajarse a La Haya o a Rotterdam, ir a ver le gran dique o los tulipanes u otros mil lugares.
Hay suficiente información sobre Amsterdam en la web de su oficina de turismo.

El Día de la Reina en Amsterdam, el "Koninginnedag"










La última semana de Abril estábamos pasando unos días en Ámsterdam, una ciudad sobre la que también quiero incluir una entrada. Bueno, pues el 30 de Abril, como todos los 30 de Abril desde hace 60 años, se celebra el Día de la Reina, que festeja el cumpleaños de la anterior reina de Holanda, Juliana, y madre de la actual, Beatriz.
Nos quedamos francamente impresionados por la sensación de contento y la participación de todo el mundo, en un ambiente que recuerda algo a San Fermín en cuanto a participación y consumo etílico, aunque hemos de reconocer que con muchos menos “efectos secundarios del alcohol”.
La noche anterior el lugar para acudir es Leidseplein. Algunos de los establecimientos de la plaza organizan actuaciones musicales y con la compañía, el ruido y algo de alcohol se vive un ambiente realmente estimulante y eufórizante.
Por la mañana fuimos a Vondelpark, una aglomeración de niños en sorprendentes interpretaciones musicales, vendiendo limonada o juguetes viejos, bailando y en general haciendo lo que mejor saben hacer para arrancar a los padres de los otros niños algunos euros. Además el día acompaño, y fue una autentica fiesta.
Por la tarde hay que acercarse al centro, a los alrededores de Leidseplein, y ver los cientos y cientos de embarcaciones de todo tipo y condición que llenan los canales de manera bastante caótica pero sin provocar grandes problemas. La gente baila, canta, bebe y se luce en ellas en un espectáculo realmente agradable.
Os incluyo este enlace, que explica mucho mejor esta fiesta nacional holandesa.